Cuando un diente presenta caries, el dentista, procederá a retirar la parte dañada y a realizar el tratamiento más adecuado en cada caso.
LA OPCIÓN MÁS HABITUAL: LA RESTAURACIÓN
Cuando un diente presenta caries, el dentista, dependiendo
del tipo de lesión y de su extensión, procederá
a retirar la parte dañada y a realizar el tratamiento más
adecuado en cada caso. Existen varias opciones, siendo la
más habitual la restauración (empaste).
Te explicamos a continuación, paso a paso, en qué consiste la realización de una restauración (empaste), uno de los tratamientos dentales más comunes.
OTRAS OPCIONES DE TRATAMIENTO
Te explicamos a continuación, paso a paso, en qué consiste la realización de una restauración (empaste), uno de los tratamientos dentales más comunes.
CONSEJOS PARA DESPUÉS DEL TRATAMIENTO
Después de someterse a un tratamiento de caries hay que tener en cuenta una serie de precauciones y conocer posibles signos que pueden aparecer.
Lo primero que hay que tener en cuenta es el efecto de la anestesia sobre las mucosas, labios y lengua. La sensación de adormecimiento suele durar unas 2-3 horas y durante ese tiempo es importante no morderse las partes blandas de la boca para evitar heridas. Conviene no masticar nada duro ni ingerir alimentos o bebidas demasiado calientes hasta que pase el efecto de la anestesia.
En algunos casos, puede aparecer sensibilidad a los cambios térmicos (frío o calor) en el diente tratado, debido a la profundidad de la caries.
En ocasiones, una vez pasada la anestesia puedes notar que el empaste “tropieza”. Ante cualquier duda, tienes que consultar con tu dentista.